La muerte ocultada – Altobar de la Encomienda
Romance
Romance sobre la aventura amorosa: amores con final trágico. Audios recopilados en La tradición oral leonesa. Antología sonora del romancero (2019), de David Álvarez Cárcamo.
A caza iba don Juan a caza con el sol iba,
los galgos lleva cansados la caza no parecía.
Sotro día de mañana y a casa su madre iba.
—Madre, me haga usted la cama me la haga bien por su vida,
que traigo el mal de la muerte y de él no me acusaría.
—Si traes el mal de la muerte y te mueres ¿qué le diré yo a María?
—Le diga que fui a Madrid a hacer una mercancía,
que te encomendase a Dios que si acaso no volvía.
Sotro día de mañana y a en casa su suegra iba.
—¿Dónde está el su hijo don Juan que él a verme no me iba?
—Me dijo que iba a Madrid a hacer una mercancía,
que te encomendase a Dios que si acaso no volvía.
Sotro día de mañana y a casa su suegra iba.
—Las paridas como yo ¿de qué tiempo van a misa?
—Unas a las tres semanas y otras a las cuatro cumplidas
y tú por ser la mi nuera al año justo y un día.
—Y usted por ser mi suegra y otra pregunta le haría:
¿las viuditas como yo qué ropa llevan a misa?
—Unas la llevan de flores y otras de pascua florida
y tú por ser la mi nuera de negrito toda irías.
Llega el día señalado la viudita sale a misa
y al tomar agua bendita le dice a su suegra:
—¿De quién son aquellas velas de quién son de cera amarilla?
—Esas velas son de un hijo, de un hijo que yo tenía.
Al decir estas palabras por detrás cayó tendida.
—Malhaya seáis la mi lengua. —Malhaya sea lengua mía,
lo debí callar un año y no pude callarlo un día.